

El gobierno británico da marcha atrás en las reformas de ayudas sociales tras la rebelión en su partido
El primer ministro británico, el laborista Keir Starmer, amenazado por una rebelión en su partido, se vio obligado el viernes a dar marcha atrás en su proyecto de ley que buscaba recortar las prestaciones para personas con discapacidad.
El proyecto, que pretendía restringir la elegibilidad para las ayudas por invalidez y enfermedad con el objetivo de ahorrar 5.000 millones de libras (6.862 millones de dólares) al año, finalmente solo se aplicará a los futuros beneficiarios, anunció el viernes el gobierno laborista.
Ante la férrea oposición de 126 diputados laboristas, casi un tercio de los 403 parlamentarios de su partido, el primer ministro prefirió dar marcha atrás antes que arriesgarse a una derrota humillante durante la votación del texto prevista para el martes.
En un nuevo giro importante que debilita la autoridad de Starmer, la ministra de Trabajo, Liz Kendall, envió una carta a los diputados, anunciando que las personas que actualmente reciben prestaciones por discapacidad seguirán beneficiándose de ellas.
"Las nuevas condiciones de elegibilidad se aplicarán a partir de noviembre de 2026 únicamente para las nuevas solicitudes", señaló.
Dos días antes, el miércoles, Keir Starmer, había afirmado que seguiría hasta el final con la reforma.
Si hubiera "retirado el proyecto de ley o perdido la votación (...) habría sido peor", opina Steven Fielding, profesor de ciencia política en la Universidad de Nottingham.
Starmer se convirtió en primer ministro en julio de 2024 tras la aplastante victoria del Partido Laborista en las elecciones legislativas, que puso fin a 14 años de gobierno conservador en Reino Unido.
Las rebeliones dentro de su partido no tardaron en llegar, como cuando anunció la eliminación de la ayuda universal para calefacción destinada a los jubilados, justificando su necesidad para restablecer el equilibrio de las finanzas públicas.
Pero a principios de junio, el gobierno anunció la retirada de esta medida, en un giro político significativo.
La popularidad ha caído desde que ganara las elecciones, hace casi un año, el 4 de julio de 2024.
Según un estudio del instituto YouGov publicado el miércoles, muchos de sus votantes ya se han alejado del Partido Laborista en favor de los Verdes, del Partido Liberal Demócrata o incluso de Reform UK, la formación de extrema derecha de Nigel Farage, favorito en las próximas elecciones según las encuestas.
B.Blanc--JdCdC