

Médicos Sin Frontera acusa a la GHF respaldada por EEUU de causar "masacres en serie" en Gaza
La oenegé Médicos Sin Fronteras (MSF) acusó el viernes a la Fundación Humanitaria de Gaza (GHF) de ser un dispositivo de "simulacro de distribución alimentaria que produce masacres en serie" en el territorio palestino, y pidió su desmantelamiento.
El sistema de distribución de alimentos, apoyado por Estados Unidos e Israel, "parece diseñado para humillar a los palestinos" en Gaza, condenó MSF, denunciando que "más de 500 personas murieron y casi 4.000 resultaron heridos al acudir a estas distribuciones en busca de comida".
Los equipos médicos de MSF reciben cada día a personas muertas o heridas mientras buscaban comida en uno de los puntos de distribución. También constataron un fuerte aumento de heridos por bala.
Debido a las restricciones impuestas por Israel a los medios en Gaza y las dificultades para acceder a la zona de guerra, la AFP no está en condiciones de verificar de forma independiente los informes de las organizaciones en el terreno.
La fundación, que recurre a contratistas armados para garantizar la seguridad en sus centros, niega que se hayan producido incidentes en los momentos de distribución.
El dispositivo es "un simulacro de distribución alimentaria que produce masacres en serie y debe detenerse inmediatamente", denunció MSF.
La oenegé señaló que la GHF obliga a los palestinos "a elegir entre morir de hambre o arriesgar su vida para obtener una cantidad irrisoria de alimentos".
Israel impuso un bloqueo humanitario al territorio palestino a principios de marzo, lo que provocó una grave escasez de alimentos, medicinas y otros productos básicos.
El bloqueo sólo se levantó parcialmente a finales de mayo, cuando la GHF empezó a distribuir ayuda.
"Los cuatro centros de distribución, situados en zonas totalmente controladas por las fuerzas israelíes tras el desplazamiento forzoso de sus habitantes, tienen el tamaño de campos de fútbol y están rodeados de puestos de observación, terraplenes de tierra y alambre de espino. Su entrada vallada sólo permite un punto de acceso", explica Aitor Zabalgogeaskoa, coordinador de emergencias de MSF en Gaza.
"Si la gente llega demasiado pronto y se acerca a los puestos de control, les disparan. Si llegan a tiempo, pero hay demasiada gente y saltan los terraplenes y las alambradas, les disparan" y "si llegan tarde, no deberían estar allí porque es una 'zona evacuada' y les disparan", denuncia.
La ONU y las oenegés humanitarias han criticado duramente a la GHF y se niegan a trabajar con ella, debido a la preocupación que suscitan sus procedimientos y su neutralidad.
M.Mercier--JdCdC